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CONSERVACIÓN

Las diferentes áreas protegidas, tanto nacionales como departamentales y municipales presentes en la Chiquitania, juegan un rol fundamental en mantener el funcionamiento de los ecosistemas, preservar el patrimonio natural del oriente de Bolivia y aportar a las estrategias locales, nacionales y globales de adaptación al cambio climático.

Sin embargo, si las tendencias de cambio de uso del suelo incrementan la pérdida de cobertura natural entre las áreas protegidas, es posible que se afecte la conectividad entre ellas y por lo tanto su función como reservorios de la biodiversidad del bosque seco tropical más importante de Sudamérica y uno de los más valiosos del mundo.

La FCBC considera que la conservación de los paisajes naturales y la rica biodiversidad presente en el Bosque Seco Chiquitano y los ecosistemas vinculados con los biomas del Cerrado, Pantanal, Amazonía y Chaco, debe enfocarse no sólo en la creación y gestión de espacios naturales protegidos, sino también en la planificación del territorio a múltiples escalas: desde paisajes hasta los predios comunales y privados. Ello, con el objetivo de mantener esa conexión para que la fauna pueda desplazarse, los diferentes tipos de vegetación mantengan su dinámica y composición y las funciones ambientales sean saludables al largo plazo.

Por otra parte, la FCBC se enfoca en contribuir a la conservación de especies de importancia biológica- ecológica y de aquellas vulnerables o en riesgo de extinción, ya sea a través de estudios específicos, monitoreo del estado del hábitat y las poblaciones silvestres o en acciones directas de valoración y protección.

Los ejes de Conservación que la FCBC ha priorizado son:

Gestión de áreas protegidas

Contribuir al fortalecimiento de la gestión de las áreas protegidas nacionales y subnacionales en la región del Bosque Seco Chiquitano y ecosistemas vinculados a través de la asistencia técnica, apoyo en equipamiento y capacitación a los directores y guardaparques, la promoción de mecanismos de participación de la sociedad local en la gobernanza de las áreas protegidas, como por ejemplo los comité de gestión y las plataformas para el diálogo territorial y el fortalecimiento de las capacidades de las autoridades locales para la gestión eficiente de los espacios de conservación. La búsqueda de complementariedad en la gestión de los diferentes niveles jurisdiccionales de áreas protegidas, como parques nacionales, reservas forestales, unidades de conservación del patrimonio natural, áreas protegidas municipales, entre otras, es una de las tareas que la FCBC realiza en conjunto con las autoridades nacionales, departamentales y municipales y los actores locales.

Planificación integral del territorio

Aportar a la planificación territorial para el desarrollo integral y sustentable, con énfasis en mantener conectividad y funcionalidad a escala de paisajes y que contribuya a las estrategias de adaptación al cambio climático. La gestión integral del territorio, en el marco de las normas vigentes como el Plan de Uso del Suelo y Plan Departamental de Ordenamiento Territorial de Santa Cruz, es clave para alcanzar los objetivos de conservación de la biodiversidad en el contexto del desarrollo sustentable en la Chiquitania. La FCBC coadyuva en la elaboración de los planes municipales de ordenamiento territorial (hoy PTDI Planes Territoriales de Desarrollo Integral), en los Planes de Ordenamiento Predial a escala de comunidades indígenas e interculturales y en predios privados, contribuyendo en lo técnico y financiero para su diseño e implementación. El reconocimiento a nivel de las autoridades y de la sociedad en su conjunto de mantener las Tierras de Producción Forestal Permanente, es una de las acciones de mayor interés de la FCBC y especialmente de los municipios de la Chiquitania comprometidos con el desarrollo sustentable.

Conservación de especies
y sus hábitats

Contribuir a la conservación de especies de importancia biológica- ecológica o con algún grado de vulnerabilidad o riesgo de extinción. La enorme extensión del área geográfica que involucra el Bosque Seco Chiquitano y los biomas interrelacionados en un territorio de más de 20 millones de hectáreas, dificulta la identificación de las especies que son clave para el funcionamiento de sus ecosistemas, la evaluación del estado de sus poblaciones, el grado de vulnerabilidad o riesgos que tienen y las múltiples interacciones biológicas que permiten que la biodiversidad se mantenga y evolucione. La FCBC ha priorizado trabajar sobre el jaguar como especie que ocupa una amplia área geográfica, está fuertemente vinculada con las condiciones de conservación del bosque tropical y al ser un depredador situado en lo más alto de la pirámide alimenticia, constituye una especie clave para el funcionamiento de los ecosistemas. De igual modo, las interacciones entre polinizadores y plantas, sobre todo de abejas nativas, constituyen indicadores de alto valor para comprender el funcionamiento de los complejos sistemas ecológicos en el Bosque Chiquitano. Por ello, la FCBC coadyuva en la evaluación y monitoreo del hábitat del jaguar y promueve estudios de la relación entre polinizadores y plantas a través del Programa de Estudios del Bosque Seco Tropical en alianza, entre otros, con la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno de Santa Cruz.

Creación de nuevos espacios naturales protegidos

Promover la creación de nuevos espacios naturales protegidos que aporten a mejorar la representatividad de la biodiversidad, zonas biogeográficas relevantes y ecosistemas en riesgo de extinción, así como a la funcionalidad ecológica a escala de paisajes. De esta manera, la FCBC busca impulsar iniciativas y acciones de las autoridades y la sociedad, orientadas a llenar los vacíos de conservación existentes e innovar en mecanismos alternativos o complementarios de protección de la biodiversidad. El incentivo a la creación de áreas comunales de conservación de bosques, al establecimiento de reservas privadas de patrimonio natural, la revisión de las normativas que aseguren la protección de las servidumbres ecológicas, entre otras acciones, son parte esencial del trabajo institucional. La FCBC, con apoyo de la UICN, impulsa la evaluación del estado de conservación de los ecosistemas en el oriente de Bolivia mediante la aplicación de la herramienta de la Lista Roja de Ecosistemas, que permite identificar aquellos ecosistemas que están próximos al colapso y la extinción.